Momentos Inolvidables de Luis Miguel Inicios

SIEMPRE LOS MARTES

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INCORPORACION DE TERCER AÑO

CATEGORÍA: EDICIÓN N° 317

Año XIII – 15 de febrero de 2017

Qué emocionante es para nosotros, el día de la incorporación al 3er. Año en el Colegio Militar Leoncio Prado. Suenan los silbatos, se sienten los gritos de los oficiales y monitores, toda la nueva promoción se despide de sus familiares y al paso ligero corre sin control y se juntan tropezando unos contra otros, nos miramos y sonreímos sin conocernos aún. Inolvidable primera formación oficial en nuestra alma mater.“Ya comienza, ya comienza” se dice cada novato.
– ¡Cuadrarse, no se mueva, mire la nuca del compañero de adelante!

Emoción, orgullo, un gran sentimiento de amistad que ya empieza, que ya llega entre nosotros los novatos, los perros del año aquel en que se inicia una hermosa amistad y gran hermandad que va creciendo poco a poco y que jamás dejará de existir. “Ya soy un cadete del Leoncio Prado, gracias Dios”, se dice a sí mismo cada uno de los nuevos cadetes, que empezamos a formarnos militarmente.
Cada cuadra se va llenando de una gran amistad, la misma que durante los tres años de convivencia va creciendo, como crecemos física y espiritualmente, llenándonos de conocimientos académicos y sabiduría con las enseñanzas de nuestros instructores y profesores. Nostalgias familiares, falta de preparación escolar, dudas en una posible equivocada vocación, son amenguadas con los apoyos espirituales del compañero de cama, de aula, de la mesa del comedor y de los turnos de imaginaria, todo ello aumenta nuestra gran hermandad.

Vamos aprendiendo a ser psicoanalistas, lo que se desarrolla más cuando ejercemos los cargos de brigadieres de sección y como monitores de cada año de estudios. Son los buenos ejemplos de cadetes superiores en disciplina, carácter militar, logros de cordones de distinción, los que nos van haciendo crecer como estudiantes y soldados castrenses, eso no se borra nunca jamás, perdura en el tiempo, en los años venideros después de estar consagrados profesionalmente.
La experiencia en nuestra alma mater es inigualable, única y diferente a cualquier colegio no militarizado. Después de egresados existen los líderes de cada promoción los que van encontrando la forma de lograr la continuación de esa vivencia, de esa gran hermandad y los ejemplos de cada promoción egresada son lo que van motivando a organizarnos debidamente y para ello contamos felizmente con nuestra Asociación Leonciopradina, donde todas la promociones se van reuniendo como al principio, como el día aquel de nuestra incorporación de cadetes de tercer año. 
Como Jasón, para llegar a ser el rey de Tesalia, tiene que viajar en busca del vellocino de oro, se une con Castor, Peleo, Hiles, Hércules y otros héroes griegos, se embarcan y zarpan en el Argo, la nave que los llevará a la más significativa aventura por los mares de la Grecia antigua y a pesar de grandes dificultades en su búsqueda, son ayudados por la diosa Hera quien acude a Tritón, hijo de Poseidón para salvarlos de enemigos que van encontrando en su travesía, hasta que logran su cometido, obteniendo el vellocino de oro.

Así considero, dentro de mis sueños, que cada presidente de Junta Directiva y nosotros la tripulación de la gran aventura de navegar en el mar de la amistad, a base de entusiasmo y amor leonciopradino, seremos siempre apoyados por los héroes que siempre están presentes como Hércules, Peleo, Castor, Hiles, porque todo leonciopradino toma y va cediendo sus cargos para la continuación de nuestra promoción, hasta que logremos conseguir el vellocino de oro, que es lo que significa nuestra hermosa amistad que nos une, que nos hermana, que en su momento nos juntará nuevamente a todos y que cuando suene el pitazo final allá, en el cielo, volveremos a escuchar la Diana y gritaremos con fervor…¡PRESENTE!

                           

¿Qué nos hace diferentes a nosotros los leonciopradinos en comparación de otros estudiantes? pues sin querer desmerecer a nadie, podemos afirmar que las vivencias, las que compartimos cada promoción desde nuestros inicios en el CMLP, nos van haciendo encontrar el más sublime y noble sentimiento de amistad. El uniforme de soldado de la patria nos hace aprender el significado de la igualdad, el juramento de defender con honor el arma que nos entrega el estado, nos hace amar verdaderamente a nuestra nación, el orgullo de lucir el cordón de distinguido y de honor, nos hace entender que nuestra dedicación a la parte académica es la única forma de lograr el éxito del mañana, los servicios de imaginaria y cuartelero logra que el cadete leonciopradino es responsable no solo del descanso sino además, de la seguridad y supervivencia del compañero de armas.
Qué importante ha sido aprender a organizarnos, el resultado es que en su momento cada promoción que egresa, acude siempre al grito de ¡REUNIÓN! Muchas veces se inicia con un grupo pequeño en los reencuentros y poco a poco vamos creciendo en entusiasmo y para ello es indudablemente importante el aporte de los líderes que siempre existirán y volvemos a abrazar a los hermanos que siempre estuvieron en nuestros hermosos recuerdos, elegimos a nuestras juntas directivas, nos constituimos y vamos alcanzando nuevamente la unión de nuestras promociones.

                          

Cada Junta Directiva de promoción tiene la responsabilidad de organizar, de coordinar diversas actividades pero, sobre todo, de mantener viva la llama de nuestra hermandad y para ello mediante la tecnología moderna crea una página web y la comunicación es permanente, las noticias importantes son recibidas en los tiempos que se requieren. Todos y cada uno de sus miembros hacen una magnífica labor de equipo para engrandecer la presentación de su promoción en el reencuentro anual de todos los excadetes de nuestra alma mater. 
Jasón y sus argonautas libraron peligrosas acciones guerreras para lograr el vellocino de oro, la guía que los motivaba era conseguirlo para que Jasón obtuviera un reino, sus hombres creían en él y entregaban sus vidas para que Zeus aprobara su deseo. Cada leonciopradino de nuestro colegio militar sabe que siempre tendrá su líder que llevará adelante la promoción, que no habrá gigantes mitológicos que podrán detener el buen rumbo, que siempre existirá Hera, la diosa que acudirá a Tritón para desafiar y eludir cuantos cantos de sirenas se interpongan por delante que, hábiles con los remos, acompañarán al gran capitán que sabrá dirigir la nave, anclando siempre en el puerto de la felicidad y la gran amistad.

Cada vez que los leonciopradinos elegimos a una nueva Junta Directiva de promoción, nuevamente sentimos muy dentro de nosotros, el toque de Diana, la marcha “Los peruanos pasan”, el silbato de los oficiales para formar, saludar y cuadrarse en atención, cuando toca el turno de darse el parte de asistencia del batallón de cadetes. Desfilamos organizadamente al comedor y participamos de un reconfortante alimento, pasamos a las aulas, el lugar sagrado de la parte académica donde nutrimos nuestro saber y sentimos en nuestros corazones el acompasado paso de desfile cuando marchamos por el Pabellón Central. Cada excadete tiene ya su propia vida, pero vuelve a vivir sus años hermosos e inolvidables, se reencuentra con sus grandes amigos y continúa siendo un caballero cadete del… Colegio Militar Leoncio Prado.

                                    ¡SEGUIREMOS BRILLANDO, SIEMPRE, COMO AZUL HOGUERA!

Rodolfo Mendoza
XVI CMLP

LUIS LASTARRIA

LUCHO EN EL CORO DEL CMLP

https://youtu.be/1cGI0MtqzMg  ALELUYA

https://youtu.be/KV_eD2fnWfY NO LLORES MADRE 

EL MONTE AZUL

salida del sol 3 cruces

MEMORIAS LEONCIOPRADINAS - V

REALIZADA POR RICARDO GONZALEZ COSTA

https://drive.google.com/file/d/0B4J580OmeBylbU55YTBSVjRXMHc/view?usp=sharing  - PARTE I


https://drive.google.com/file/d/0B4J580OmeBylMWw3VDJvUTB1X00/view?usp=sharing - PARTE II


https://drive.google.com/file/d/0B4J580OmeBylYjVCZ0xIc09RSjA/view?usp=sharing - PARTE III

MIERCOLES DE FANTASIA

Nos reuníamos desde el 2006 en el restaurant LA MELCHORITA todos los miércoles con  Berto,Hugo Ricardo y yo. Como ellos no querían ir al lomito y quería verlos quedamos así. Lo que en un inicio fue un almuercito simple, al correr de los meses se convirtió en una reunión fraterna llena de alegría en la que nos alimentábamos de ternura y muchas emociones.

El hijo de Hugo Castro en su despedida me dice: …”mi padre nunca podía faltar a esos almuerzos. Se preparaba con ganas y emoción porque venía muy contento y me decía que esa amistad siempre sería eterna…”Es que nos metimos espiritualmente. Hubo, claro que si porque siempre pasa, discrepancias y alejamientos pero continuamos en esas fraternas reuniones.

Era lindo caminar apurado y ver a Hugo y Ricardo sentaditos juntos en la banca frente a la puerta del local. Pese a que se fastidiaban bastante se querían mucho. Compartieron directivas y su tremendo amor por la XIX.Berto casi siempre llegaba atrasadito porque debía buscar playa para su camioneta pero llegaba feliz.era tanta su sonrisa que ya no se le notaba tanto lo zon que es.

Esos miércoles se convirtieron a veces en reuniones más numerosas porque recibíamos las visitas de otros hermanos en el modesto loca y ya los comensales de esa hora se estaban acostumbrando a ver unos jubilados reír a carcajadas mientras degustaban sus alimentos emocionales..

Por esas cosas de la edad y el tráfico y el calor seguramente es que deje de verlos más seguido.

Hace unos meses le dije al neguito y cuando nos reunimos? y le dije : te invito el miércoles y lo hice con el sr. Cachencho y Berto y así fue. Quedamos en reunirnos los segundos miércoles de cada mes. Fantaseaba en esas reuniones y soñaba en que podíamos hacer algo más y promover que otros hermanos vayan allí. Si bien hemos quedado en que cada uno paga lo que pide eso no significa que puedo hacer un obsequio por ese esfuerzo de ir hasta el centro por un menú. Se que ellos no lo aceptan xque son únicos pero seguiré insistiendo. Eso si le dije a Ricardo : nada de chupaditas¡¡¡ jajajaja

Me había llamado el sr. Cachencho para confirmar que iba de todas maneras porque como Ricardo no tiene celular no sabía asi que le dije : a la 1 si o si estaré allí. Ya la vez pasada habíamos quedado y al llegar al local no había nadie. Al poco rato de haber pedido el menú llego Ricardo y se sentó en otra mesa. Que risa  no nos habíamos visto.

En eso venia fantaseando mientras caminaba hacia el loca cuando siento que me tocan la oreja. Casi reacciono violentamente pero pensé debe ser alguien que me conoce .Otra vez y como iba a cruzar la pista voltee y era Cachentito con una bolsita. Yo también llevaba una bolsa con el tremendo libro de las memorias V del neguito que ha hecho una recopilación increíble de los escritos sobre nuestra XIX y la Asociación.El hace cosas únicas con una paciencia de santo.
http://jlava381.blogspot.pe/2017/02/memorias-leonciopradinas-v.html

Seguimos caminando y opinábamos que ojala venga Ricardo o Alberto. Entramos al local y bien sentado en la mesa 19 nos esperaba con su sonrisa de niño nuestro hermano neguito.

Nos abrazamos efusivamente y los dos tocayos también  e intercambiaron unas bolsitas. Frunci la ceja y le dije: oigan nada de mariconadas ah¡¡¡ jajaja y el sr. Cachencho siempre irónico dice: tú no te metas en nuestras cosas plop¡¡¡ o sea era cierto que ambos tenían un entripado. Ah no ¡ pensé esto debe aclararse así que comencé a observarlos y ambos conversaban muy amenamente mirándose a los ojos. Hasta que el neguito (como es sordo y levanta la voz )le dice: no te hubieras molestado tanto en traerme todo eso. R.castro le dice : no te preocupes es que tengo mucho. KJO no me vengan con eso y les dije. Ya hablen y ambos se rieron al unísono: el sr. Cachencho batiendo sus poderosas mandíbulas dice yayaya toma unas moneditas para tu colección. Jajaja.Es que ambos son coleccionistas de monedas y billetes y cada vez que nos vemos intercambian sus reliquias. Jajajaja

Como siempre el neguito comienza a vacilar a la chinita. Una sra moza que nos atiende desde que era soltera y bien flaquita. Hoy es madre de dos niños y espera otro. Increible .Han pasado 11 años y mucha agua ha pasado bajo el puente y ahora que hay huaicos peor.

Conversamos de todo pero más nos demoramos en construcción civil. Es que Ricardo González ha construido minidepartamentos y como es tan minucioso nos explicaba las bondades de cada uno. Nos explicaba uno por uno quienes eran sus inquilinos, de donde venían que hacia y donde iban.Oe le dije porque tanta información. Es por seguridad nos dijo. Ricardo Castro ( en adelante los llamare R1 al neguito y R2 al sr. Cachencho) siendo auditor y reglamento tambie contaba sus experiencias. Despues pasamos al rubro político y económico. Uff se nos fue la hora rapidito y nos quedamos con las ganas.

Seguro que el 8 de marzo seguiremos con nuestro alimento emocional.

Si se animan me avisan para guardar sitio. Yo invito la primera vez . Asi se hace con los virginales.

https://www.facebook.com/jlavillavicencioa/videos/10212338668883437/

Pepelucho

MARTES DE ALEGRIA

Todo el día recibo llamadas de los hermanos de la promo por distintos motivos. A veces por algún teléfono. Otras para saber cómo estoy lo cual me reconforta tremendamente .Otras veces, para  preguntarme sobre algún trámite de jubilación como Luchito Ugarte que les envía saludos .Lo cierto es que siempre me mantengo al día de uds. y sabiendo cómo se encuentran y sus familias porque ahora más me interesan sus hijos y nietos¡¡¡¡¡jajajaja.

Hable con Mariano y estaba muy bien. Hable con Eloy y estaba un poco triste porque decía que quería ir en la noche al lomito. Me llamó Pepe Hurtado para decirme que lo iba a ver y así fue. Me llamó Pepe Jordán para saber si estaba ya en el lomito porque se moría de ganas se saber de los muchachos como nos dice él.

Pensando en todo eso me fui al lomito y me preguntaba a quién veré hoy. Es que a veces me dicen voy a ir y nunca vienen así que no pregunto porque al subir las escaleras el corazón me palpita más fuerte pensando a quien veré.

Es como una película .Vas subiendo las escaleras y cuando llegas arriba ves la platea y ohhhhh sorpresa están todos menos los que esperaba que iban a estar.jajaja. Es que eso es lo lindo verlos. Hace rato que no veía a Reynaldo por alli. Es que  trabaja hasta tarde y a veces ya el fisico no le dá o está de viaje.Pero estaba allí con su famoso pisco “SEPA DEL REY” que es delicioso. suave, aromático y se toma con gusto y con las personas que uno quiere. Es que el 5 fue su cumple y ese gesto de estar allí con sus patas de toda la vida es gesto de hermano. Contento de vernos y nosotros de escuchar su sapiencia en temas agrarios, de clima y de varias cosa más..Es un erudito .Es que tiene la herencia de su señor padre.

También estaba Gustavo Lavarello que a veces no puede venir como antes que era infaltable porque entendemos que debe cuidarse. Pero cada vez que esta lo pasamos muy bien. Se pica a veces pero sigue con su singular personalidad. También estaba el chiquito Richi Casanova que ya se estaba dejando extrañar. Llegó también Humberto Giol que tiene cada anécdota de su vida que debe escribir un libro. Nos invitóa la playa El Silenció donde administra un bar karaoke que se encuentra en el segundo piso del Hostal “EL EMBRUJO” y dice que si vamos el vienes o sábado, al día siguiente traerá  una lancha llena de pescados y cocinará para nosotros. Muy cariñoso su gesto.

Tambien estaba el famoso Julio Argumedo llegadito de USA para estar en su Perú. Feliz de estar nuevamente con nosotros y recibiendo las cochineadas de Gsutavo ,Pepe Maderita Hurtado y del chino al recordar sus peripecias en Tacna.

En línea tuvimos a Luchito Tiravanti al que le iban a hacer unos análisis allá en Australia donde vive pero se dio tiempo para hablar con todos. Cómo se le nota su felicidad cuando nos habla. A veces no se escucha bien y se corta pero llama de nuevo y se pone en onda. Asimismo, hablamos con Pepe Jordán que saludó a cada uno de los presentes. Me indicó que Pocho Klug ya no vive en la Punta. Si alguien sabe cómo ubicarlo que nos indique. Finalmente hablamos con  Eloy Ureta. Pepe Hurtado(Pepe Rex) lo fue a buscar para traerlo .Estaba listo en su silla de ruedas y con ganas y anhelante como los chibolos en su debut. Pero lo más prudente es que espere una semana más para que se recupere mas. Estaba apenado pero entendió que primero es su salud. Eso si, si pasa más de una semana vamos a su casa .Le avisamos antes para que se prepare la parrilla.

Buena noche con el chinito Jo que ya es mas asiduo y se divierte y nos divierte con sus ocurrencias filosóficas de la vida. Coco Seminario ahora está más delgado por sus ejercicios manuales y comiendo menos. Finalmente, el anfitrión del chinito Garcia siempre preocupado porque no falte nada. Llego con su camisa negra y Gustavo le dice: chino que tienes? Estas flaco. Estas comiendo o no te dan de comer¡¡¡¡ jajaja. Se desquitó y cuando agarra carne no la suelta.

A la salida Julio Argumedo dice : ahí está mi taxiiii y se dirige a el. Oe le decimos eso no es taxi. Es un patrullerooooo. Jajajajaja

Hasta la próxima

Pepelucho

Descanse en paz, mi monitor

DESCANSE EN PAZ MI MONITOR

En setiembre del 2012 nos preparábamos para recibir a dos hermanos veintiúnicos radicados en el exterior. Pepe Reyes volvería de Alemania después de algunos años y Nelson Rojas llegaría de Honduras para reaparecer por vez primera desde que egresamos del CMLP. Conscientes de que nuestras vivencias, tras aquellos muros maltratados por la brisa del mar, están profundamente ligadas a aquellos muchachos de entonces, que aprendieron a paso ligero su rol de formarnos como cadetes del colegio militar; decidimos invitar al almuerzo de bienvenida, a quienes habían sido sus monitores aquel siempre recordado año de 1964, así como al presidente de la XIX Promoción. Pepelucho Villavicencio aceptó de inmediato y nos aseguró que llevaría a Víctor Plaza Vidaurre con él, pero también nos adelantó que sería difícil que Enrique Falcone Vigna pudiera hacerlo pues se encontraba delicado de salud. Efectivamente, Enrique nos remitió un e-mail agradeciendo la invitación y confirmando su imposibilidad de asistir. Nos apenó bastante saber que se encontraba enfermo, pues siempre le tuve mucho aprecio, no fue mi monitor directo pero teníamos un amigo común y habíamos hecho amistad de inmediato. Aún recuerdo las veces que lo acompañé al estadio cuando el entrenaba 110 m. con vallas e, infructuosamente, me quería enseñar a "pasarlas", cuando a los 13 años de edad, para mí eran "saltarlas" y terminábamos muriéndonos de risa.

Tal como habían prometido, Pepelucho y Víctor asistieron el 15 de Setiembre de 2012 al almuerzo en casa de Alberto "Siete Machos" Castro, recibiendo las muestras de afecto de los cuarentaitres veintiúnicos presentes. Como era natural, muchos preguntaron por la salud de Quique Falcone. Nuestros hermanos mayores no pudieron ocultar su preocupación por el estado del amigo de toda la vida, pero todos abrigamos esperanzas en su recuperación. Quedará para el recuerdo el video que grabó Pepelucho, donde Nelson Rojas y Julio Antonioli le enviaron emotivos mensajes de aliento a quien fue su monitor.

Tres días después, en la misa por Gabriel Chipoco Prada, conversamos con nuestros amigos de la XIX, sobre lo incierta que es, ya, esta etapa de nuestras vidas, pero no pensamos que las malas nuevas volverían tan pronto. El 2 de octubre, el teléfono nos trajo el eco de la triste noticia. Quique, quien había pasado todas las vallas que tuvo en su camino, quien había llegado tantas veces con éxito a las metas que se puso en la vida, en lo personal y profesional, encontró una valla que nadie puede pasar, la de ser inmortal. Tuvo entonces que saltar, libre, ligero, ya sin dolor, al mas allá, alegre, sonriendo y con su famoso palito "Renee" en la mano, aquel palito que le hacía recordar a los cadetes de la quinta sección, que no había nadie mas "palomilla" que él en el entorno. Aquel martes por la noche, diez de su "perritos" correctamente uniformados, como a el le hubiera gustado, se hicieron presentes alrededor de su féretro. Desde el fondo de sus corazones salió una sola voz, el último adios para quien fue un verdadero hermano mayor: ¡Enrique Falcone Vigna... Presente!... Descanse en paz, nuestro monitor por siempre! Pepe Hinojosa-XXI CMLP

ALBUMES DE PROMOCION DEL CMLP

ALBUMES DE PROMOCION DEL COLEGIO MILITAR LEONCIO PRADO

ALBUM DE LA VI PROMOCION   

ALBUM DE LA VIII PROMOCION

ALBUM DE LA X PROMOCION 

ALBUM DE LA XI PROMOCION

ALBU, DE LA XII PROMOCION 

ALBUM DE LA XIII PROMOCION

ALBUM DE LA XIV PROMOCION 

ALBUM DE LA XV PROMOCION 

ALBUM DE LA XVII PROMOCION 



ALBUM DE LA XVIII PROMOCION  

ALBUM DE LA XIX PROMOCION 

ALBUM DE LA XX PROMOCION  


ALBUM DE LA XXI PROMOCION 

ALBUM DE LA LV PROMOCION

Nobleza fraterna

José Luis ‘Pepelucho’ Villavicencio XIX CMLP

Dos excelentes tomas de dos partidas de diferentes categorías que demuestran la pericia, pulso y oportunidad de Pepelucho
nuestro reportero gráfico y narrador de lujo que inician este artículo escrito, muy a su estilo, en las pruebas de natación.

La natación es uno de los deportes que puede practicarse sin límite de edad y por ello participan de todas las edades. Hoy las pruebas se realizaron en dos piscinas por ello es que solo puedo comentar las de las primeras categorías. Ojala algún hermano menor nos regale con sus tomas. Oscar ”Reloj” seguramente nos hará llegar los videítos de esta calurosa mañana no solo por el radiante sol sino por el calor competitivo que han puesto los participantes y sus barras.
Sabemos que ser leonciopradino es ser hermano incondicional para siempre y cuando estamos juntos todo puede suceder. Y lo digo porque hooy se corrió las pruebas de aquatlon, prueba muy difícil que requiere entrenamiento para tener resistencia porque se combina el atletismo y la natación porque en cada una la respiración es distinta. Habia que ver a nuestros hermanos mayores como competían a despecho de la edad.

Nuestro querido Dante Yorges, quien nos ha demostrado a lo largo de este camino su amor al deporte y nos ha regalado triunfos de todas las categorías tanto a nivel nacional como internacional, tenía pendiente una medalla. Precisamente no había ganado nunca una de oro en esta prueba. Tiene miles de medallas pero le faltaba esa y a sabiendas de su estado de salud se arriesgó. Como no es nadador se dio íntegro en la prueba (Alejo Perata el chiquitín coloradito multideportista de la XV me decía: yo nado y por eso no me gasto pero vi a Dante hacer tremendo esfuerzo y hummm…). Efectivamente, Dante salió de la piscina algo cansado y comenzó a darle duro en la prueba atlética. Para esto Carlos Salazar, otro ícono deportivo leonciopradino iba a delante y, ya casi al llegar a la meta, en un gesto de fraternidad que solo los leonciopradinos la tenemos, bajó el ritmo para que Dante que venía a tras pudiera llegar primero y ganar su ansiada medalla. (ojala Óscar tenga ese videíto).

Dante llegó pero el esfuerzo había sido demasiado y se descompensó porque se comenzó a desvanecerse poniéndonos en una angustia larga. Felizmente fue auxiliado por los bomberos paramédicos y fue evacuado al hospital Casimiro Ulloa acompañado por Gustavo Van Ordt de su promo. Felizmente ya está fuera de peligro. Carlos muy preocupado al comienzo pero al saber que ya estaba bien recibió la medalla correspondiente para llevársela al gran y querido “loco”

Todo esto nos permite siempre reflexionar sobre nuestra fraternidad. Actos como los de Carlos es digno de resaltar así como la nobleza de las damas que acompañan a sus esposos y los arengan a ganar premiándolos con su afecto. Fue lindo estar cerca a la esposa de Carlos Gordillo y ver cómo lo filmaba y arengaba. Asimismo, sentir cómo los nietos gozan viendo a sus abuelos competir sabiendo que esa es una forma de trasmitirle su valía. Digno de ver es a nuestro hermano de 82 años competir todas las pruebas y lucir orgulloso su medalla ganada.

¡Uff…! cada instante uno se nutre de emociones en estos eventos porque se retroalimenta nuestro espíritu de la experiencia y energía de las distintas generaciones. Justo viendo a nuestro hermano de la V competir y después ponerse el polo con el nombre de Julio Maladengoitia notable deportista e inolvidable amigo que en el 2007 los juegos llevaron su nombre. Recordamos cómo era y cómo se nos fue temprano. Era también multideportista

Finalmente se dio la ocasión para tomarle una foto a Carlos Salazar en la misma forma como le fue tomada en el año 61 y que fuera portada en el prospecto de 1962 .

La vida siempre nos regala situaciones increíbles por eso hay que vivirla con ganas
Un abrazo
Pepelucho

PD . 
En este enlace hay unas fotitos de esa acuática mañana…

https://onedrive.live.com/redir?resid=4EC59C9D08BA5292!23385&authkey=!ALpiOjwEKnzaGRs&ithint=folder%2cjpg

 

Los sueños sí se hacen realidad

Rodolfo ‘Tombito’ Mendoza XVI CMLP
“La vida es sueño, y los sueños, sueños son”, decía Pedro Calderón de la Barca en su obra “La vida es sueño” a través del soliloquio de Segismundo. Y yo soñé una hermosa quimera, una bella ilusión, convertirme en caballero cadete del Colegio Militar Leoncio Prado. Fantasía de un adolescente que siempre quiso un poco más de lo que tenía.
Era el año 1958 y por mi barrio pasaban los cadetes del primer colegio militar del Perú, con ese hermoso uniforme con alamares y botones dorados con el escudo de nuestra patria. Dejaba yo de jugar al fútbol y la pelota pasaba por el arco convirtiéndose en gol que nos hacía ir perdiendo el partido. Los muchachos de Cinco Esquinas me reclamaban y yo, absorto, no les hacía caso.

– Pelón, no sueñes, nosotros no podemos ingresar a ese colegio. Tendrás que terminar en el Pedro A. Labarthe, donde ya eres un crack del fútbol, además cuando regresas de clases pasas por la casa de tu amada y eso no creo que lo quieras dejar… Vamos, vamos Pelón, ponte en la defensa y ya no permitas más goles… ¡Apúrate que ya debe llegar el policía de tránsito y no nos dejará jugar!
Suspiraba hondamente y volvía al juego que tanto me gustaba. Los muchachos se reían y con sus dedos índices se tocaban la sien en señal que el pelón estaba loco con su sueño.
Un día sábado del mes de junio de 1959, la 1ra. Sección estaba en un corre, corre de las cuadras a los baños de aquel inolvidable Cuartel Guardia Chalaca…
– Tombito… ¿Sabes? te pareces a un tamal mal hecho, esa polaca está muy ancha y se te ve mal, anda mírate al espejo y te darás cuenta. La mía está bien, pero quiero algo más holgado, si gustas te la cambio. Toma pruébatela y tú me dirás si estás de acuerdo.
Fui al baño y la polaca me quedaba entallada, efectivamente me quedaba mejor y ya no se me veía como ese tamal que decía Dante Belleggi. Lo vi y mi polaca le quedaba ancha pero como es alto no se le veía mal. Sentí un hincón en el pecho. Eran los años en que a pesar de las bromas, de los insultos y “chapas”, existía una gran hermandad leonciopradina que hacía que estos gestos cotidianos nos iban haciendo cada vez más unidos, tal como hasta el día de hoy en que ya pasamos muchos de nosotros los setenta años y los intercambios de polacas de gorras, de mamelucos y borceguíes se han cambiado por otros gestos como el de entregar tarjetas de los almuerzos de los reencuentros de cada año para que asistan los que no pueden costearlas, así como también apoyos a los que están mal económicamente, otros con males de salud y apoyos para conseguir empleos, etc., etc.
Todos nos arreglábamos unos a otros con las caponas, abroche de cuellos y acomodar el correaje y gorra. Al fin ya estábamos tan igual que los cadetes de cuarto y quinto año, vistiendo nuestro uniforme de gala para salir de paseo. Quienes no habían obtenido el cordón rojo de distinguido o el dorado de honor, se prometían a sí mismo que para el segundo bimestre lo tendrían.

Foto cortesía de José Luis Villavicencio ‘Pepelucho’ XIX

En esos tiempos no existían tantos parroquianos que utilizaban los tranvías de San Miguel a Lima los días sábados y yo iba en uno de ellos, de pie, con postura, con sobriedad y porte militar, asido de uno de los manubrios de los asientos. Mientras el tranvía pasaba por los barrios que conforman toda la Av. Brasil yo iba recordando cuando jugaba al fútbol con los chicos de Cinco Esquinas y veía pasar a los cadetes del CMLP. “Se hizo mi sueño, Señor. Gracias Dios mío por tu bondad”…

– Lucho, quiero hablar contigo como una madre que no quiere que su hijo no pueda cumplir un sueño. Rodolfo acaba de ingresar al Colegio Militar Leoncio Prado y tiene que matricularse para lo cual se necesitan seis mil soles. Yo le di permiso para que postule y lo he visto cómo madrugaba para estudiar solo, no ha requerido una academia de preparación y su esfuerzo ha sido recompensado. Sé que hice mal en no comunicarte, pero yo lo he ayudado con mi trabajo de costura en el Estado Mayor del Ejército, lamentablemente no alcanzó salir becado como era mi esperanza. Han postulado más de mil jóvenes y han ingresado 400. ¿Podremos apoyarlo?
– Cristina, cualquiera no ingresa a ese colegio, es un orgullo para mí, pero sabes que mi sueldo no lo permite. Seis mil soles ¿De dónde los saco por Dios? ¡No, no me mires así! Tú sabes que la plata de mi padre la maneja mi hermana y ella lo quiere todo para sí. Será imposible acudir a él, porque tendría que consultarle a ella y no lo aceptará.

Campoy era una Hacienda cuyos propietarios era la familia Rébora y Don Teodoro Mendoza Reyes era el caporal quien manejaba toda la peonada y demás servidores de la Hacienda, el hombre de confianza, de la rancia familia que lo quería mucho por su efectivo trabajo; él desconocía el gran sueño de uno de sus nietos.
Mi padre se limpiaba el polvo de sus zapatos ya que al haber caminado por el polvoriento camino que conducía a la Hacienda Campoy, se había llenado de tierra muerta. Se limpiaba la frente pero el sudor que sufría no era tanto por el calor sino por el temor o respeto que siempre tenía él y sus hermanos menores al viejo caporal, cuyo genio era de temer. Mientras esperaba al padre de los Mendoza, sorbía el agua del vaso que gentilmente le había alcanzado una de las concubinas del viejo mandamás y curaca absoluto de toda la servidumbre de la vieja casona que él ocupaba. 
Mi padre después de un buen tiempo vio por fin llegar a un jinete que cabalgaba, trotando con prestancia su inigualable caballo blanco con montura de fino cuero labrado y adornos de plata. Como siempre, con un hermoso sombrero de ala ancha, bigotes bien enrollados hacía arriba, con pañuelo blanco amarrado al cuello, cinturón también con adornos de plata y su inigualable fuete con el que nunca dejaba de golpear las botas camperas de color marrón confeccionadas en la Zapatería Vallejo, al costado del Palacio de Gobierno. Todavía estaba fuerte y de un solo brinco bajó de su caballo que relinchando se despedía de su amo al ser llevado por uno de los peones que lo acariciaba con esmero.

– ¿A qué debo la alegría de recibir la visita del mayor de mis hijos? Espero que no sea dinero porque eso ya sabes yo no manejo.
– ¿Qué tal padre?, te saludo con mi afecto y cariño de siempre. He venido a traerte una feliz noticia. Tu nieto Rodolfo, como tú sabes es muy apegado a los estudios y ya terminó segundo de secundaria, siendo becado por sus exámenes al ingresar.
– Bueno, ese nieto es mi orgullo porque es el hijo del mayor de mis hijos, que yo sepa todavía tiene que terminar secundaria. Ah y quiero contarte que la familia Rébora me acaba de asegurar y ya estoy en planilla considerado como empleado y no peón u obrero como tú que no quisiste estudiar al igual que todos tus hermanos. Por esa alegría, orgullo y ejemplo para ustedes vamos a tomarnos una copita de pisco de pura uva.
– Padre con su venia, quiero decirle que Rodolfo acaba de postular e ingresar al Colegio Militar Leoncio Prado, fueron 1,200 y solo son 400 los que han logrado ingresar y entre ellos está tu nieto, papá, y quiero que me ayudes con la matrícula. Yo sé que Adela es la que maneja tu dinero, pero papá yo soy el hijo mayor y no se está cumpliendo con el mayorazgo, pero eso no te reclamo solo quiero que me ayudes con la matrícula cuyo dinero yo te devolveré. Tú sabes que Cristina y yo trabajamos, entonces, solo es un préstamo.
– Hummm… podríamos vender una de mis vacas y no molestar a Adela para que no se entere, porque ella no va a querer, tú sabes que ella no tiene hijo varón y por eso no quiere mucho a mi nieto. Ya no guardo dinero porque sabes lo que me pasó con uno de mis primos que me engañó con las monedas de oro que me dejó mi padre, ni yo mismo sé cuánto era ese dinero, pero por lo que tiene ahora tu tío, que sí estudió, debe haber sido una gran cantidad, por eso no quiero que mis nietos sean burros como yo. Mira, ya tengo la solución, el mayor de los Rébora está hoy día acá en la Hacienda, vamos a conversarle del asunto y estoy seguro que él nos dará la plata y después yo lo arreglo. No tienes que devolverme nada, eso es para mi nieto y espero verlo con su uniforme en una de las fiestas que siempre me hace tu hermana para justificar que ya no tiene la misma cantidad que cobra todos los meses en el negocio de la familia Rébora en Lima. Tú y tus hermanos se casaron jóvenes y no estudiaron y ya ves que es muy difícil poder sostener lo que quieren los hijos. En esta vida, si no estudias no llegas. El amor temprano, hace daño, pero así es la vida. Vamos, hijo, vamos…
Con el transcurrir de los años, cuando decidí acompañar en sus últimos tiempos a mi querido padre, pude enterarme de todo lo que ocurrió cuando ingresé al CMLP y de otras vivencias que cada hombre tiene en su vida. Mi padre murió en mi casa, cumplí su deseo, me dijo: “Sólo cuando ya no pueda caminar, entonces me llevarás a tu casa para morir estando con mis nietos”. Se fue al cielo dejando en la puerta de su casa tres placas de profesionales, sus nietos que lo llenaron de orgullo en su querido y viejo barrio del Agustino.
Bajé del tranvía que era el urbano que llegaba hasta Cinco Esquinas y caminé al igual que aquellos cadetes de 1958 y vi a mis amigos jugando al fútbol. Ellos dejaron de jugar y muy alegres me felicitaban y me pedían que me cambiara para jugar con ellos. Me acordé entonces de lo que me dijo un nuevo amigo que era Teniente del Ejército: “Nunca olvides lo que fuiste, pero tampoco olvides quién eres en la actualidad”.
Regresé cambiado con la ropa que usaba siempre en mis querido Barrios Altos de aquella época y les dije:
– ¡Muchachos, tenemos la Pampita de Barbones… Allá, vamos allá, nos llenaremos de tierra y nos heriremos con los cascajos, pero no invadiremos la calle… Ah, y sobre todo le vamos a ganar a las “Lornas” de la Quinta Blanca!
– ¡Bien Pelón, ta bien… vamos muchachos, vamos a ganar!
Mientras corría, engolosinado, dominando la pelota, me decía… ”Nunca olvidaré que soy de Cinco Esquinas, pero tampoco olvidaré que soy un caballero cadete del Colegio Militar Leoncio Prado… Gracias, Dios mío”.

Monitores de 5to. año, 1961 – XVI CMLP

¡SEGUIREMOS BRILLANDO, SIEMPRE, COMO AZUL HOGUERA!