Linda nota
hermano.Has rrecorrido todo el camino que a veces por ser largo se nos escapa a
muchas cosas.
Cuantos
recuerdos y cuantas anécdotas. Pero olvidaste que tu eres el salvador de
nuestro Dream team de fulbito. Nuestro equipo plagado de estrellas a veces no
acierta y siempre llegas con tu tremendo
puntazo que nos has dado la victoria muchas veces .
Asimismo no
cuentas como , cuando Cesar fue detenido, te metiste como sea para dar el
abrazo de la XIX a nuestro querido hermano que hoy requiere más que nunca del
abrazo de sus hermanos.
OH cuando
cumpliste 50 años y tu linda familia te preparo una sorpresa y te calentaste porque no te avisaron noooooooo
Muchas
gracias por esa linda nota.
2012
Por :
Luis Ludeña Saldaña
CRÓNICA DE UN REENCUENTRO XIX-LEONCIOPRADINO
Estimado Piñita,
Al llegar a la
cuadra 29 de Aviación, me encontré que ya no estaba el micro y mi hija me
señala allí hay dos viejitos en la puerta del Restaurant, (El
Lomito);efectivamente poniéndome los lentes descubrí a dos de la promo, a Eloy y a Lincoln Pinzás
que estaban refunfuñando sobre tu persona, ya no querían ir, yo que venía de
madrugada de Tarapoto, los convencí para irnos en un taxi y nos embarcamos
rumbo al cuartel Hoyos Rubio en el Rímac, convenciéndolos de que al piñita gurú
de nuestra promoción no se lo maldice, aunque falle una vez, tiene mil
aciertos y…,pero llegamos.
Realmente fue un bonito reencuentro
leonciopradino de la XIX, solamente quería decirte que ni bien llegué me fui a
ver el estandarte, si correspondía a la
promo, ya que no reconocía a muchos y reconocía a pocos, hasta que me fui al
baño y pude comprobar la realidad al mirarme al espejo y efectivamente habían
pasado 50 abriles hermano y reconocí a todos.
Bueno como todo
reencuentro te encuentras de todo, me tocaron un par de palurdos que hablaban
de Miami, Miami Beach, Coral Gables; bueno yo que he tenido la oportunidad de
estar por medio mundo y conozco como están los peruanos en USA, lateando o en
la cuarta categoría y que estuve hace un mes en el Club nocturno: Villa 221, me aburrieron los chicos y tuve que dejarlos en
su fanfarronada.
Después de las fotos de reglamento, me
encontré con Carlos Villacorta de la quinta y me invitó a ir al restaurant de
Pepito Velasco Moulet a San Miguel, que curiosamente ninguno de los dos
conocíamos, aunque te parezca mentira, en el transcurso del viaje tuve la
conversación más emotiva de mis últimos años; efectivamente descubrimos que
recordar es vivir y nos paseamos por toda la quinta, la sexta y la cuarta y
encontramos que hoy pertenecemos todos a una sola sección a la XIX.
Al llegar al restaurant, encontrarlo al gordo
Velasco con su polo rojo, me hizo recordar algunos años atrás cuando en el
Crillón llegó con una hembrita que recogió en Panamá y regaló un pasaje a
Miami, que se lo sacó el misio de Dongo y todos pensamos que lo iba a donar
pero huiflas no fue así. En ese momento me afloró el recuerdo de una de las famosas
papeletas de don Danilo Valencia; el teniente colorao; que le puso al gordo
Velasco, póngase una papeleta ¡cadete¡;motivo mi teniente, agarrarse los huevos
en formación.¡patapufete¡; qué tiempos aquellos.
Y me afloró otra papeleta famosa al boliviano
Juan Carlos Fernández; cuando lo encontró durmiendo en el aula y le metió un
pitazo en la cabeza y le dijo su famosa frase, póngase una papeleta ¡cadete¡ motivo
mi teniente; por dormir como una puta arrecha después de haber dado su polvo y
así te venía la papeleta carajo.
Que tiempos, qué tiempos aquellos, cuando
ingresamos a la Escuela Militar de Chorrillos, lo encontramos de instructor y
nos llamó en el día a los de la XIX, nos reunió y nos dijo en la noche los de
la XIX del Leoncioprado, me buscan en mi cuarto y el colorao Rivera Novoa le
preguntó ¿para qué mi teniente?, ¡para sacarles la mier…da…!así era el colorao
un gran pendejo, descanse en paz mi teniente, se lo ha ganado.
Y volviendo al restaurant, que rico comimos
carajo, solamente una preocupación, casi todos le meten al pastillar, pastilla
aquí, pastilla allá y también al trago y al dente, y me sale otro recuerdo,
cuando regresó de estudiar en Italia el ñato Falcone y nos fuimos con Lalo Colchado a su recepción de graduado y
nos sacó volando el pendejo pura guana italiana; ñato te extrañamos el sábado,
nuestro corazón está de tu lado tu nos comprepá. Un abrazo de hermano.
Piñita; está bien que llegue viruta bien al
terno, bien al carro, pero que se deje de huevadas, como se va a sacar la
camisa y justo en la mano tenía una huincha que parecía que iba a chambear,
espantó a media XIX, déjate de huevadas viruta llévanos pero legal, sin
atarantes.
Nunca me voy a olvidar cuando Huguito Castro
me metió un cachetadón, pero bien ganado; le dije que guardará plata para el
abogado, ya que él era el tesorero de la promo, porque el Colegio nos había
iniciado un juicio; ustedes saben cómo era de renegón; ¿por qué carajo?; por tu
culpa le dije ¿cómo es eso?, es que el colegio ha perdido todos los fantasmas
de la Siberia; por tu visita inesperada de inspección, todavía me duele Huguito
corazón.
Cuántos recuerdos, un día suena el teléfono
en la noche y César Martínez, Director del Colegio me invita a tomar desayuno
al día siguiente y me regaló un vaso insignia; allí lo tengo guardado hermano
mi corazón está de tu lado. Un cariñoso abrazo del alma.
Todavía tengo guardado el Pastoruri, una
hermosa foto de la tierra del cholo Walter Soriano, dicen que ya no es el
mismo; pero gracias a Walter lo tengo en su esplendor; Un abrazo cariñoso mi
corazón también está de tu lado.
A Césitar Vértiz, también lo extrañamos, como
no recordarnos de nuestro Club de la XIX, ese cariño sincero que recibimos,
esas noches inolvidables de recuerdos, gracias César, un abrazo a tu querida
esposa; todo lo que podemos ofrecer es nuestro humilde corazón, pero con
cariño.
A don Manuelito Alache; Manolito ¿has
traído?, estuve con Lalo; tú me compenpá también, un abrazo grande, estoy de tu
lado mi hermano.
Tiramos el maletín con los tragos y al otro
lado estaba el suboficial del Carpio, Hey a
dónde van cadetes; mire sufí, nos han invitado a la inauguración del trocadero, regresen
carajo, en su último esfuerzo, felizmente ya estaba cansado; nos fuimos piñita,
por último no iba ser la primera vez que desobedeceríamos órdenes; mi querido
Batman te has ido a practicar balón militar y nudo de guerra con San Pedro; un
abrazo mi hermano.
Nos vemos